PANEL INFORMATIVOCierre de vacaciones útiles en ambiente festivo
¿Cuánto se puede aprender en dos semanas? Mucho, mucho, cuenta una madre de familia emocionada al ver a Lucy, su hija de 9 años, bailar una cueca y luego un taquirari, como examen de lo aprendido.
Ese fue uno de los números de la jornada de cierre con más de 700 alumnos sumados los turnos de la mañana y tarde. La pertinaz lluvia de este viernes, día fijado como cierre de actividades, no fue impedimento para que los niños y jóvenes sumados a los padres de familia llenaran el salón Esteban Bertolusso, mientras decenas esperaban en la puerta repleta del ambiente su turno para hacer su respectiva demostración.
Los cursos de kínder y nivelación de materias de primero de primaria a cuarto de secundaria llenaron una vez más la demanda de los vecinos de la zona y muchos otros que hacen un largo trayecto hasta Achachicala donde se encuentra la Universidad.
Medio centenar de jóvenes en ambos turnos, casi todos alumnos de la U. Salesiana son los ocasionales profesores; jóvenes que han optado por la vocación de servicio y se han vestido en estas dos semanas de maestros.
¿Profe está bien mi voz? pregunta un niño a su docente de oratorio, quien con una sonrisa le dice que sí y personalmente festeja en lo íntimo el objetivo alcanzado. Es que se han graduado en este día lluvioso los dos: el niño y su profesora.
Este es el propósito, que los niños y jóvenes más nuestros jóvenes docentes aprovechen al máximo este tiempo, que en las breves palabras que se les da diariamente encuentren a Dios como su norte, practiquen el respeto a los otros y superen las lagunas que tienen en la escuela. Son vacaciones útiles con espíritu salesiano, comenta Gerardo Ledezma quien junto a Nelson López llevan adelante este proyecto que se consolida año tras año y se cumple.
Este viernes se abre un paréntesis hasta medio año, para volver a reencontrar a estos niños y jóvenes quienes dentro de pocos años, seguramente estarán en las aulas de esta Universidad que abre sus puertas a todos.
